Por Regla Zulueta 29 05 2008
El Comité Provincial de la Unión de Arquitectos e Ingenieros de la Construcción (UNAICC) en la capital y el Gobierno, convocan a una nueva edición del Premio de la Ciudad de La Habana de Arquitectura e Ingeniería 2005/2008 con el propósito de destacar las obras que más contribuyan a preservar y enriquecer el patrimonio construido, su historia, mejorar las condiciones de vida de sus habitantes y a proteger el medio ambiente.
El doctor en ciencias y arquitecto Oscar Hernández, presidente de la Asociación de Arquitectura, exhortó a las especialistas estén afiliadas o no a la organización, y a las estudiantes. Pueden hacerlo con estudios avanzados y de integración interdisciplinaria (Artes y Ciencias), así como las obras vinculadas a la Batalla de Ideas.
Todos los trabajos presentados deberán abonar una cuota de 100 pesos en moneda nacional y no se establecen límites en la cantidad por participantes.
Se concursarán en las categorías de recuperación de una edificación, nueva edificación, obra nueva o reconstrucción de ingeniería, diseño urbano, ordenamiento y reanimación urbanística, obras de la Batalla de Ideas, publicaciones (libros y ensayos y concurso de ideas.
Los trabajos se recepcionarán hasta las 5 de la tarde del viernes 24 de octubre del 2008 y se otorgará un Premio por categoría con diploma y 3 mil pesos.
Oscar Hernández, Premio Vida y Obra de Arquitectura 2005 y presidente de la Comisión Organizadora recordó que la arquitecta Felicia Chabloin, fue una de las ganadoras en una edición anterior en la categoría de publicaciones.
Subrayó que otra premiada ha sido la arquitecta Aileen Marín en la categoría ideas con el título “Una propuesta de remodelación de un distrito de Alamar” y que otras profesionales han participado en trabajos como coautoras.
Dijo que han sido reconocidas en otras ediciones la remodelación del Palacio de Bellas Artes, el hotel Telégrafo y el Miramar, la tienda La Puntilla, así como la reconstrucción del edificio Focsa.
Finalmente Oscar Hernández manifestó que este concurso se diferencia de otros porque ofrece la posibilidad de participar con ideas y otros exigen obras presentadas, algo que limita a los más jóvenes que no tienen posibilidad de hacer un proyecto.
El Comité Provincial de la Unión de Arquitectos e Ingenieros de la Construcción (UNAICC) en la capital y el Gobierno, convocan a una nueva edición del Premio de la Ciudad de La Habana de Arquitectura e Ingeniería 2005/2008 con el propósito de destacar las obras que más contribuyan a preservar y enriquecer el patrimonio construido, su historia, mejorar las condiciones de vida de sus habitantes y a proteger el medio ambiente.
El doctor en ciencias y arquitecto Oscar Hernández, presidente de la Asociación de Arquitectura, exhortó a las especialistas estén afiliadas o no a la organización, y a las estudiantes. Pueden hacerlo con estudios avanzados y de integración interdisciplinaria (Artes y Ciencias), así como las obras vinculadas a la Batalla de Ideas.
Todos los trabajos presentados deberán abonar una cuota de 100 pesos en moneda nacional y no se establecen límites en la cantidad por participantes.
Se concursarán en las categorías de recuperación de una edificación, nueva edificación, obra nueva o reconstrucción de ingeniería, diseño urbano, ordenamiento y reanimación urbanística, obras de la Batalla de Ideas, publicaciones (libros y ensayos y concurso de ideas.
Los trabajos se recepcionarán hasta las 5 de la tarde del viernes 24 de octubre del 2008 y se otorgará un Premio por categoría con diploma y 3 mil pesos.
Oscar Hernández, Premio Vida y Obra de Arquitectura 2005 y presidente de la Comisión Organizadora recordó que la arquitecta Felicia Chabloin, fue una de las ganadoras en una edición anterior en la categoría de publicaciones.
Subrayó que otra premiada ha sido la arquitecta Aileen Marín en la categoría ideas con el título “Una propuesta de remodelación de un distrito de Alamar” y que otras profesionales han participado en trabajos como coautoras.
Dijo que han sido reconocidas en otras ediciones la remodelación del Palacio de Bellas Artes, el hotel Telégrafo y el Miramar, la tienda La Puntilla, así como la reconstrucción del edificio Focsa.
Finalmente Oscar Hernández manifestó que este concurso se diferencia de otros porque ofrece la posibilidad de participar con ideas y otros exigen obras presentadas, algo que limita a los más jóvenes que no tienen posibilidad de hacer un proyecto.
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